El principal componente de la berenjena es el agua, por lo que se puede consumir grandes porciones, a un bajo costo calórico (1 taza aporta 20 calorías), lo cual ayuda a personas diabéticas y con sobrepeso. Además, su piel es abundante en antioxidantes que participan en la prevención del cáncer y estatinas que ayudan a reducir el colesterol sanguíneo.
Su forma permite rellenarla con carne, pollo, queso, arroz y más vegetales. También es atractiva en medio de un sándwich o hamburguesa, y como principal ingrediente de lasañas y picadillos.
Compartir por email